Juan podría describirse como un amante de la naturaleza capaz de reflejar todas sus pasiones en una generosa sonrisa
Juan Manuel nació el 9 de marzo de 1980 en Bogotá Colombia. Desde niño mostró su amor por la naturaleza, su gran curiosidad por aprender. Exploró la magia, la electricidad, la química. El microscopio le causaba fascinación y el telescopio le abrió paso a la astronomía. Se encantó con la carpintería y uno de sus juguetes favoritos era el martillo que muy pequeño aprendió a manejar con destreza.
Ya adolescente se interesó por la música le fascinaba el Jazz, el blues, la salsa, los clásicos, el cine, el dibujo, la fotografía, las estampillas. Era un gran coleccionista
Siempre en compañía de sus hermanos y amigos, compartía propuestas interesantes, divertidas y en muchas ocasiones arriesgadas.
Tenia una profunda y estrecha relación con su padre, cuya muerte marca un hito en su vida, que lo lleva al desencanto, del que sale con sus estudios de biología en la Universidad Nacional, donde encuentra su pasión por la botánica y el bosque.
Crea Albura, De los bosques para los bosques, empresa que integra su pasión por la madera, su talento artístico como joyero como diseñador de muebles y de objetos, su habilidad manual, su conocimiento profundo de las características de las maderas preciosas y su proyecto de encontrar formas para hacer rentable el uso sostenible del bosque, de manera que quienes lo habitan elijan conservarlo.
Gana una beca en el Catie De Costa Rica, para hacer su maestría en Manejo y Conservación de Bosques Tropicales y Biodiversidad, en la que obtiene el reconocimiento de mejor promedio.
A lo largo de su ejercicio de la Botánica, se enamora de los árboles, de su belleza, de sus aromas y texturas, de su arquitectura y elige la tarea de sembrarlos donde la vida le diera la mínima oportunidad y como dice Mabel Suescún, que lo conoció profundamente, comunicó esta pasión a todos aquellos a quienes Juan tocó con el espíritu de bosque y con sus manos impregnadas del olor inmemorial de la madera.
